Operamos nuestra propia flota de autos Americanos de los años 1950s. Estos clásicos han sido utilizados en múltiples filmaciones de películas, documentales y videos musicales.
Tenemos una relación muy especial con nuestros autos. Compartimos con ellos sudor, lágrimas y a veces nuestra sangre. Les hablamos, y nos enfadamos con ellos. Los nombramos en honor a personas que han tenido un impacto considerable en nuestras vidas.
Restauramos nuestros autos y les damos mantenimiento en nuestro Garaje NostalgiCar (abierto para visitas). Restauramos las piezas aquí o, de no ser posible, las importamos desde los Estados Unidos por vías tortuosas y bastante caras.
En Cuba, para brindar servicios de transportación es obligatorio someter los autos a una inspección gubernamental todos los años, tras la cual se coloca el sello correspondiente en el parabrisas.
Venga y pasee con nosotros mientras le contamos la historia de nuestros autos, y sobre cómo construir un negocio familiar en la Cuba revolucionaria.